Este pasado fin de semana fueron las fallas de Valencia, erala primera vez que asistía y tenía cierta ilusión pero, caminando hacia el centrode Valencia, concretamente en Marqués de Turia estaba la feria del libroantiguo, mis amigos y yo no pudimos contenerlos y acabamos pasando la tardeentre libros, había de todos los precios desde 0.50 céntimos hasta cientos deeuros. Compré uno sobre mitología universal que ya lo tengo prácticamenteleído, aunque mis compañeros cargaron bastante más que yo. No logramos acabarla feria, era demasiado larga, luego solo vimos 3 fallas, no nos dio tiempo amás, pero no me arrepiento, me gustaba más la feria del libro.
Lo mejor de todo es que al día siguiente ya íbamosdispuestos a ver las fallas pero pasamos otra vez por delante de la feria yvolvimos a pasar la tarde allí. No tengo culpa de sentirme a gusto entre esoslibros viejos, leyendo los títulos, abriéndolos, leyendo algún trozo de ellos ycomprando alguno que me encante, además, volví a ver a mi profesora de filosofíade cuarto de la eso, hacia mucho tiempo que no la veía, me gusto volver a verlay además que fuera en aquel lugar, note que algo nos unía y pudimos quedar paraconversar al pasar fallas. Me encantó el ambiente que había: gente elegante eintelectual y seguramente con mucho más dinero que yo, mirando esos librosviejos. Si, me gustaron mucho las fallas de Valencia, pero me gusto más laferia del libro
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